miércoles, 1 de marzo de 2006

Votar o no votar...


Es sintomático de las democracias, nuevas y viejas, presentar un elevado índice de abstencionismo. Como lo explica IDEA, esto es algo natural, porque en general, los ciudadanos tienen otros mecanismos para impulsar sus intereses; mecanismos que superan a los canales tradicionales como los partidos políticos.

Sin embargo, para cualquier partido, el abstencionismo es algo serio, sobre todo en nuestro país, ya que su financiamiento depende de la cantidad de votos que logre en cada elección.

¿Qué provoca el abstencionismo?

Es más fácil entender qué motiva el voto. Para decirlo muy claramente, basta ver los reality shows tipo La Academia: la gente participa, sobre todo, porque le interesa el resultado.

¿No nos interesa el resultado de las elecciones presidenciales? Pienso que sí, pero los partidos, las instituciones políticas, el IFE y las pocas organizaciones civiles que existen no han hecho un trabajo efectivo para aclarar a los ciudadanos: ¿Si mi voto cuenta, cómo es que no veo diferencias, cómo es que no pasa nada?

Ahí está el tip para los presidenciables...

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